En nuestro grupo, Basque Sumando, hemos recibido numerosas preguntas por parte de muchas personas no nacionalistas, que nos trasladan su preocupación para las próximas elecciones autonómicas de Euskadi. Su problema suele residir en que no encuentran dentro del ámbito constitucionalista, partidos con suficiente atractivo y consideran que no cumplen sus expectativas. Incluso que los ven como muy dispuestos a ser colaboradores condescendientes con los nacionalistas, por lo que no saben como actuar.
Para ayudar a tomar una decisión planteamosla situación previsible a dos semanas de las elecciones. En primer lugar hay una concentración de voto nacionalista alrededor de los Batasunos, que esperan unos resultados muy buenos, como las últimas encuestas les auguran.Entre 21 y 24, subiendo en 2 su abanico. Por el lado del PNV, aunque cae en las últimas estimaciones 1 escaño, se mantiene el abanico de 23 a 25.
Es por tanto una situación en la que los dos grupos nacionalistas van a plantear su contienda particular para ver quien es el primero, y la suma de votos de ambos puede ser muy importante. Lo que será utilizado interpretado como una clara apuesta por el soberanismo y el separatismo.
Entre los partidos no nacionalistas, el PSOE vuelven a bajar en las últimas encuestas, quedando entre 14 y 15, el PP baja entre 10 y 11con un 25% de su electorado en dudas. El partido de Rosa Diez puede llegar a 1-2 parlamentarios y la IU, no adscrita a los batasunos, sube por trasvase de votos de socialistas a una horquilla de 1 a 2.
En resumen un resultado posible sería 45 parlamentarios de los partidos nacionalistas y 30 de los no nacionalistas. O peor aún, si algunos no nacionalistas dan un voto favorable al PNV para frenar a BILDU.
Con todo ello en la mente, la recomendación es votar a los partidos no nacionalistas que más confianza den y en último caso, acudir a votar y hacerlo en blanco para que los votos de la abstención no se interpreten como votos a favor del nacionalismo, al hacer la comparación entre los votos de uno y otro campo.
Es un esfuerzo el de votar que merece la pena hacer. En las pasadas elecciones fueron 85.000 personas las que no votaron en Guipúzcoa, muchas de las cuales se arrepintieron posteriormente al ver los resultados.
