NUEVO COMUNICADO DE ETA

El pasado fin de semana ETA ha realizado un nuevo comunicado que naturalmente ha sido publicado por sus voceros, el periódico batasuno de marras. El comunicado no ha dicho nada nuevo, pero ha dicho muchas cosas aún sin citarlas. La primera es que existe. Lo que algunos, o quizá muchos, políticos y periodistas negaban, ya que daban por terminada a la banda. La segunda que no se arrepiente ni ha cambiado de objetivos. No ha manifestado arrepentimiento por el daño causado a las Víctimas y al País Vasco, que ha tenido en estos años su mayor freno al desarrollo en esa organización criminal. No plantea colaboración alguna para esclarecer los crímenes pendientes, 326, ni plantea la entrega de las armas y explosivos, si no es a cambio de conseguir sus fines: Salida de Euskadi de las policías del Estado, liberación de sus presos, etc. En definitiva nada nuevo y sí más de lo mismo. A los presos de ETA  en estas condiciones, la vía Nanclares se les queda corta y por eso, está resultando un fracaso pese a la bajada de pantalones de algunos. Pero lo preocupante no es lo que ETA diga, que no nos sorprende sino lo que dice el Gobierno de la Nación en su respuesta al comunicado: “Disuélvanse”.  Solo eso. ¿Qué hay  de los crímenes sin aclarar? ¿Qué hay de las armas y explosivos? ¿Qué hay de la obligación de cooperar con la Justicia, para conseguir mejoras carcelarias, en los condenados de ETA? Para algunos ETA no ha dicho nada nuevo, pero para todos ha dicho mucho, demasiado.   Basque Sumando 28-11-2012

326 TESTIMONIOS

Del informe-balance que la Fiscalía de la Audiencia Nacional ha hecho, a petición de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, sobre los crímenes de ETA se conoce que hay 326 asesinatos que no han sido aclarados aún. Es la primera vez que se conoce este dato y se pone negro sobre blanco en un informe que debiera estar hecho desde el primer momento y que debiera ser libro de cabecera del Ministro del Interior, de cualquier Ministro del Interior de cualquier Gobierno. Porque el hecho de que el 40% de los crímenes de ETA con resultado de muerte no se hayan aclarado dice muchas cosas y algunas no buenas precisamente. La primera es que la maquinaria estatal de defensa y aseguramiento de la justicia no ha funcionado lo bien que debiera. La segunda  que no ha habido colaboración alguna por los asesinos, miembros de la banda ETA, para aclarar sus crímenes y que esa es una exigencia de la ley vigente para otorgarles cualquier mejora carcelaria. Lo que se ha hecho, por tanto, sin exigírseles antes y debidamente esa colaboración. Se ha aplicado también con retraso la condena al alejamiento de las víctimas, ya que no ha sido requerido ni concedido hasta épocas muy recientes, pese a que la Ley ya lo contemplaba y sólo se aplicaba para los casos de violencia de género. Estas son a bote pronto algunas conclusiones y otras se pueden deducir del hecho de que hay casos en los que no existe ni un documento que muestre que se ha hecho alguna investigación. Son pocos pero los hay. En resumen que se podía y se debían haber hecho las cosas mejor por el lado de los Gobiernos y  de las Administraciones Públicas y que de seguir así se estará dando carta de naturaleza  a la impunidad y al olvido. Eso es lo que las asociaciones de Víctimas no quieren y por eso han organizado como cada año las Jornadas dedicadas al recuerdo y a la memoria de sus allegados asesinados  y con ellas estaremos siempre desde Basque Sumando.

UN AÑO DESPUES CON ETA Y SIN LIBERTAD

Algunos periodistas, como D. Federico Quevedo, y algunos periódicos, se muestran contentos porque “Hace un año desapareció ETA” y lo publican así con alborozo y grandes titulares. Puede que su intención sea buena, pero el resultado es pésimo porque adormece y engaña a la opinión pública. Tenemos alguna experiencia en este asunto por los muchos años viviendo en el País Vasco y por haber sido algunos de nosotros cargos públicos, como concejales en Guipúzcoa, durante muchos años de asesinatos, secuestros y terrorismo. Por ello nos consideramos autorizados para expresar una opinión clara y rotunda. ETA sigue estando viva y sigue actuando. Lo hace cuando manda comunicados en apoyo de su brazo político BILDU o cuando actúa a través de sus presos, a los que controla en sus acciones y en sus declaraciones. Cuando no colabora con la Justicia para aclarar los cerca de 300 crímenes terroristas pendientes de aclaración, cuando no entrega las  armas ni los explosivos, cuando recibe con homenajes al asesino Bolinaga. Sigue actuando aunque de  diferente manera y ha dejado de matar porque, en sus cálculos, le resulta más conveniente que las pistolas callen ahora y que hablen sus políticos. Pero ni se arrepiente ni pide perdón. Su sombra permanece, como la mafia, y es sentida por todos los que vivimos en el País Vasco  y Navarra. Lo prueban los 35 ayuntamientos guipuzcoanos donde, en las pasadas elecciones municipales, el PNV no pudo presentar listas  con sus siglas en dichos pueblos por el temor de sus votantes a identificarse como tales. ¡Que decir  de los votantes del PP y del PSOE en esos mismos pueblos! No hay motivos por lo tanto para alegrarse de lo que no ha sucedido y en cuanto a la declaración de permanente interrupción de sus acciones terroristas, todos sabemos cuantas veces han cambiado de postura, encontrando siempre la justificación de su cambio en las culpas de los demás. Esta es la verdadera situación y no la que se pretende dar  por políticos interesados y periodistas desconocedores de la realidad vasca. Este miedo a ETA y su brazo político, BILDU,  ha movilizado un gran número de votos del PP y del PSOE en las pasadas elecciones hacia el PNV, como forma de voto útil.