miércoles, 19 de junio de 2013

ATRACO FISCAL EN SAN SEBASTIAN


La Ciudad de San Sebastián es una de las que soporta una mayor carga fiscal dentro de las ciudades españolas. Comparada con Bilbao, nuestros vecinos, soportamos un 30% más de impuestos y tasas locales, entre los que tienen especial incidencia el IBI, Impuesto de Bienes Inmuebles, y el de Vehículos.

Respecto al primero, el IBI, año tras año ha sido elevado sin cesar. Por un lado mediante la revisión del valor catastral, la base del impuesto y de otra, del tipo impositivo que se ha ido ajustando al alza según los IPC anuales.

Recientemente el Equipo de Gobierno de Bildu ha propuesto un recargo del 50% para las viviendas que no estén habitadas, que se ha aprobado y se halla en fase de recaudación, con los interrogantes de como se definirá una vivienda no habitada. Lo cierto es que en San Sebastián hay pisos que se usan  los fines de semana y en el verano, lo que responde a su naturaleza costera con atractivo vacacional. La elevación del IBI puede suponer otra razón para desprenderse del piso o apartamento y dejar de venir a nuestra Ciudad.

También el incremento del IBI afecta a las actividades comerciales ya que los precios del alquiler se ven empujados al alza, en una situación de crisis que no admite mayores costes a los pequeños comerciantes.

Ahora que el valor real de los inmuebles ha caído, a los ciudadanos nos parece de justicia que este impuesto se ajuste a la baja, pero las Administraciones Públicas no se acuerdan de rebajar los impuestos, sea en la base o en los tipos, y es que las necesidades de esas Administraciones son permanentes y por eso son insaciables. En eso las posturas de los diferentes grupos políticos apenas cambian y todos recurren siempre a gravar más al contribuyente.

 En el caso del Impuesto sobre Vehículos, a su coste se suman las tasas de uso del suelo público, OTA en el lenguaje  coloquial, que en San Sebastián ha tenido una extensión y un incremento desmesurados, con lo que el contribuyente ve mermados sus recursos disponibles.

Por eso resulta especialmente hiriente que el Alcalde Izaguirre haya hecho “huelga” el pasado día 30 de Mayo sin tener en cuenta los muchos asuntos pendientes que tiene el Ayuntamiento, entre otros éste de reducir los impuestos. Ha sido una huelga de motivación política y por tanto ilegal, que le debe costar algo más que el descuento correspondiente en el sueldo.